Ver para creer: el pueblo más pequeño del País Vasco tiene un kilómetro cuadrado de superficie y se fundó en 1287
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En el corazón del País Vasco se encuentra un rincón que parece detenido en el tiempo. Este pueblo, con apenas un kilómetro cuadrado de extensión, no sólo es el más pequeño de la región, sino que también guarda siglos de historia que comienzan en 1287, año de su fundación.
Su reducido tamaño no le resta importancia, ya que cuenta con un gran legado histórico y cultural. ¿Quieres conocer su historia y los monumentos que puedes ver en él?
Éste es el pueblo vasco que sólo tiene un kilómetro cuadrado de superficie
Lanestosa es el municipio más pequeño del País Vasco. Según los últimos datos del INE tan sólo tiene unos 266 habitantes. El 6 de junio de 1287 recibió el título de ‘Villa’ de manos del noble y señor de Vizcaya, Diego López de Haro.
Cuando se funda esta aldea, lo que se pretende es consolidar una población estable al lado de un camino transitado desde hace muchos años: el que une las montañas de Burgos con el Cantábrico.
Los habitantes de Lanestosa se dedican de forma mayoritaria a la agricultura y al sector servicios, dejando a la industria y a la construcción como actividades testimoniales.
Esta localidad es una de las que mejor conserva su origen medieval. Las estrechas calles del entramado urbano están diseñadas en viales rectos y empedrados. En ellas, aún se pueden observar palacios de los siglos XVII y XVIII mezclados con casas de carácter popular. En estas últimas, destacan vistosos balcones repletos de flores.
¿Qué ver en Lanestosa, el pueblo más pequeño del País Vasco?
En Lanestosa puedes ver la iglesia de San Pedro, un edificio renacentista del siglo XVI que se ubica en el centro de este municipio. Es un templo construido con mampostería. El interior está distribuido en tres tramos. Por su parte, las figuras se presentan con vestimentas amplias de pliegues duros y rostros pocos expresivos. La policromía de este santuario es de un siglo más tarde, concretamente de 1717.
También puedes visitar el Palacio Codina ubicado al final de la calle Real. Se trata de la construcción residencial más culta y el edificio civil de mayor interés de Lanestosa. Otros de los lugares que no te puedes perder es el calero, un horno que se utilizaba para producir cal a partir de piedra caliza.
El Puente Viejo tiene gran relevancia en esta localidad. Se construyó en 1760 para mejorar el paso por la villa tras recibir la noticia de que existía un proyecto para desviar el Camino Real de Madrid a Laredo por Los Tornos a través del Valle de Soba.
Paseando por este pueblo puedes encontrarte con la Plaza Vieja, que, desde 1992, es la Plaza Balcón de Vizcaya. Se trataba del centro social del pueblo y las casas que se encuentran a su alrededor llaman la atención por sus grandes balcones de madera.
Por su parte, la Plaza Nueva o Plaza de los Dantzaris tomó el relevo de la anterior cuando el tránsito por la carretera N-629 impidió el uso del antiguo espacio festivo, según informan desde la web del Ayuntamiento de Lanestosa.
Por último, si quieres visitar algunas de las calles más llamativas tienes que dirigirte hacia la calle Real, la calle Mirabueno y la calle Lehendakari Aguirre, entre otras.
¿Cómo llegar a Lanestosa?
Si vas a Lanestosa en coche desde Bilbao tardarás una 1 hora y 5 minutos por la A-8 y N-629 aproximadamente. Si te diriges desde San Sebastián, tardarás 2 horas y 10 minutos por la AP-8 y A-8. Por último, si partes desde Vitoria-Gasteiz el trayecto es de 1 hora y 50 minutos por la A-8.